DOCUMENTACIÓN POÉTICA: RITMOS Y RELACIONES ENTRE LO VISUAL Y LO SONORO¹
Patricia Tovar- LIBEN
Vivimos en una situación de caos y vulnerabilidad, pero al mismo tiempo, estamos ante la posibilidad de reinventar el sentido del cuidado y de la comunidad. Por lo tanto, es más que urgente recuperar el saber poético, unir la investigación con el arte. Creo totalmente en ello y en esta charla quiero compartir con ustedes algunas de las ideas que han guiado mi trabajo en los últimos años. Particularmente, la idea de documentación poética, concepto vinculado a la investigación de campo.
En el año 2009, generé una primera conceptualización de lo que he nombrado como “Etnografía artística y dialógica”. Esta manera de hacer etnografía, integra la concepción dialógica de la cultura y la actitud de apertura sensible; es al mismo tiempo un reconocimiento de los aspectos lúdicos y de la cualidad emergente de la cultura, que incluye lo inesperado y lo azaroso. La Etnografía artística concibe al trabajo de campo como la oportunidad para visualizar la dimensión poética de lo real y realizar documentaciones poéticas.
La idea de una documentación poética no se limita a lo escrito ni a lo visual, también tiene que ver con el cuerpo y con la escucha. De tal manera que lo que ocurre en el proceso etnográfico es justamente muy cercano al planteamiento de una “investigación-transcreación” lo racional y lo intuitivo están totalmente entreverados, “La investigación-transcreación implica el paso de las nociones clásico-románticas de autor y obra a las de co-productor y documento “(Bogarin, Yépez, Galindo, 2016: 7)
La escucha nos revela esos entornos acústicos significativos y tenemos la posibilidad de generar registros múltiples: sonoros, visuales, objetuales.
A partir del desarrollo de diversos proyectos y la puesta en práctica de una potencia creativa que se activa a partir del diálogo y la apertura, surge la propuesta concreta de la Documentación poética.
La documentación poética plantea al deseo como condición para compartir, a la imaginación como motor del deseo y a la mente más allá del pensamiento racional.
Documentar poéticamente, es acercarse con la mirada a un contexto, a un proceso. Comprender, desde la sensibilidad y la intuición, la manera como las cosas aparecen, se hacen visibles, se imaginan.
Decir, recordar y ensoñar a través de las imágenes y el sonido define también una intencionalidad y hace posible la condensación y la unidad entre distintas dimensiones del hacer y de los contextos, de los entornos.
Documentar en este sentido es hacer memoria y reorganizar el discurso. Es crear a partir del lenguaje mismo, escrutar las posibilidades de la imagen y del sonido.
Considero que tanto la imagen como el sonido poseen una dimensión simbólica y epistémica, al aportar informaciones y ser modos de representación de saberes que nos permiten conocer formas de vida y formas de mirar el mundo.
Jaques Aumont, ha planteado tres modos de existencia de la imagen: simbólica, epistémica y estética. Afirmando con ello que la imagen es portadora de saberes, posee la capacidad de unir distintos significados y condensarlos. Al mismo tiempo, posee una cualidad estética, tiene cualidades expresivas, produce sensaciones tanto en quien la mira como en quien la crea. En este caso propongo que tanto la imagen como el sonido, generan un ambiente de sensaciones, que propicia una respuesta cognitiva que interpreta y crea. El sonido también tiene la capacidad de afectarnos poderosamente, al revelarnos un universo de emociones y texturas sonoras que cohabitan con nosotros.
La documentación poética es una manera de integrar distintos lenguajes y disciplinas. Usar el lenguaje visual y el sonoro en su dimensión estética conlleva a la creación de un ambiente de impresiones sensibles, evocaciones e intuiciones.
La documentación poética permite comprender y comunicar de manera no lineal y polifónica. Nos permite ver y oír varias líneas melódicas a la vez, separadas y juntas. La realización de un registro poético, la creación de imágenes, de piezas sonoras o audiovisuales conlleva el desarrollo de una “sensibilidad en movimiento” que descubre y accede a la poética de cada instante.
La documentación poética nos acerca a la energía de los contextos, de los movimientos y de la interacción.
Un referente y un antecedente de este planteamiento lo encontramos en Gastón Bachelard, quien generó su propia perspectiva fenomenológica al ocuparse de temas como la poética del espacio y la intuición del instante. Bachelard, fue un crítico de la separación sujeto-objeto y generó una investigación en torno a la experiencia vivida a partir de la exploración de relaciones entre el cuerpo y el espacio, la imaginación y los entornos, preguntándose por lo diminuto y lo vasto. Bachelard propone al instante poético como profundo y complejo. Nos muestra que ese instante poético genera asombro y conmueve, nos afecta emocionalmente y a la vez nos mueve a pensar-reflexionar, que sin duda es parte del quehacer investigativo.
El instante poético escapa de los binarismos, de la oposición mente-cuerpo. En el instante poético se une lo íntimo y lo vasto.
Cuando hablamos de procesos de documentación poética, buscamos justamente esa unicidad entre lo íntimo y lo inmenso entre la mirada propia y el devenir. En la documentación poética, en cada instante, nuestra intuición y existencia nos asombran y se unen el adentro y el afuera.
Un proceso investigativo que incluye lo poético, es un desafío mayor pues nos confronta abiertamente, confronta la noción de objetividad, para mostrarnos la centralidad de lo dialógico.
He dicho que el sonido tiene también esa cualidad epistémica, que genera una forma de saber y produce activaciones cognitivas.
La documentación poética es una especie de tejido en donde lo visual, lo sonoro, lo oral, se van entrelazando para abrir nuevas formas de conocer.
Steven Feld (2013) ha planteado a la Acustemología como la unión de la acústica y la epistemología y plantea la relevancia del sonido como una modalidad del conocimiento y también como una forma de manifestación de nuestra relación con el mundo, una relación poética que cada pueblo entabla con el sonido y su entorno.
Feld plantea que nuestros cuerpos están “sintonizados” con los lugares, puesto que el sonido emana y penetra. Emana de los cuerpos y los penetra. Esta reciprocidad es un mecanismo creativo que nos orienta en los lugares. Afirma que tanto la escucha como la producción de sonido son competencias encarnadas, corporizadas. En sus propias investigaciones de campo encuentra estas formas dialógicas, estos intercambios entre: cuerpo-entorno-sonido-habla. Donde el sonido es reflejado y absorbido. Dado y recibido en un flujo, en un continuum.
Uno de los aspectos importantes de la Acustemología es el poder generar “cartografías poéticas” las cuales están integradas por prácticas composicionales y vocales que relacionan los cuerpos con los entornos, con las memorias y con los sonidos. Feld habla de escuchar y conocer el mundo, de integrarnos a una forma de manto sensorial sonoro de cada lugar.
La vida social es experimentada y se vuelve significativa a través de lo sonoro también.
De acuerdo con Steven Feld, hay un continuo diálogo poético entre los cuerpos y los entornos sonoros.
Feld hizo trabajo de campo en la Papúa Nueva Guinea durante varios años. Su pieza sonora “Voices of the Rainforest” es una manera de cartografía poética que nos acerca a las voces, a las relaciones entre los cuerpos, el habla y los cantos del pueblo Kaluli y los sonidos de la selva tropical.
Es el registro sonoro de la vida diaria del pueblo kaluli de Bosavi, Papúa Nueva Guinea. La pieza sonora fue realizada en 1991; posteriormente Feld genera una nueva pieza audiovisual que recupera los sonidos y los vincula con una documentación poética de la densa selva tropical.
De tal manera que una Documentación poética, nos plantea la posibilidad de fluir entre lo íntimo y lo vasto, reconociendo los aspectos sensoriales de los entornos, sus relaciones con los cuerpos, sus ritmos y formas de aparecer, de afectarnos y de hacernos conocer.
Documentar poéticamente, acercarse con la mirada a un contexto, a un proceso. Comprender, desde la sensibilidad y la intuición, la manera como las cosas aparecen, se hacen visibles, se imaginan.
REFERENCIAS:
Aumont, J. (1993) The Image, London: BFI Press.
Bachelard, G. (1997). La poética de la ensoñación. México: FCE.
Bajtín, M. M. (2000). Yo también soy. México: Taurus.
Bogarín,Yépez,Galindo (2016) “Certain methods of research-(trans)creation:The (ethno)poetics of Jerome Rothenberg” [Ciertos métodos de la investigación-(trans)creación:La (etno)poética de Jerome Rothenberg] Societarts. Revista de Artes– Facultad de Artes UABC No. 1, Vol. I – Enero-Abril de 2016.
Feld, S. (2013) Una Acustemología de la selva tropical. Departamento de Antropología, Universidad de Nuevo México.
Tovar, P. (2015) «Documentación poética” Material del Diplomado en Antropología del arte, publicado el 16 de Mayo en Iberoamérica Social.
[1] Charla presentada dentro del Coloquio de Antropología y enfoques multidisciplinarios sobre el estudio y la creación audiovisual. Convocado por la Facultad de Antropología de la UAEM. Mayo 12 de 2021.